Ráfagas: Voracidad panalista
Sin duda es fuerte el título de la entrega de hoy del Itinerario Político.
Por eso arrancamos con un puñado de preguntas.
¿Qué pensarían los ciudadanos si hoy probamos que López Obrador es responsable, en México, de cien veces el número de víctimas del ataque a las Torres Gemelas? ¡Sí, cien veces el crimen de las Torres Gemelas!
¿Qué dirían los mexicanos si confirmamos que AMLO es culpable de mil veces el número de víctimas de la represión ordenada por el criminal presidente, Gustavo Díaz Ordaz, en 1968, contra estudiantes en Tlatelolco?
¿Sí, mil veces el crimen de estudiante de Tlatelolco!
¿Cuál sería la opinión ciudadana si documentamos que la negligencia de Obrador mató el equivalente a siente mil veces “los 43” de Ayotzinapa? ¡Sí, siete mil veces el crimen de “los 43!!
¿De qué tamaño tiene que ser la tragedia que viven los mexicanos a causa del peor gobierno de la historia, para exigir que López Obrador sea llevado a la justicia no sólo por “traición a la patria” sino por negligencia criminal; verdaderos crímenes de “lesa humanidad” y crímenes de Estado?
Y es que el tamaño de la tragedia que se vive en México es del tamaño de la estadística criminal provocada por Obrador, en sólo 38 meses de gobierno; un recuento de terror.
Pero si aún lo dudan, vamos a los datos duros.
Primero vale recordar –que según cifras oficiales–, el número de personas que a diario pierden la vida en México, sea por la pandemia, por la violencia criminal, feminicidios, secuestros, asaltos y desapariciones, es la cifra propia de una guerra.
En realidad se trata de una incidencia mortal mayor a algunos de los más escandalosos ataques contra la humanidad, en muchas partes del mundo.
Un país ensangrentado y un reguero de muertos que parece no importar a ninguna institución en México, a las que nada les importa hacer justicia.
Instituciones que solapan a todo el aparto del poder; desde el presidente hasta su prole, su claque, sus lacayos y secuaces más criminales y pillos.
Pero también es cierto que buena parte de los ciudadanos parecen haber perdido no sólo la capacidad de asombro e indignación, sino de reclamo; los anticuerpos sociales para rechazar a un gobierno criminal, como el de López.
Pero vamos por partes, para entender el tamaño de una tragedia que a diario viven millones de mexicanos, pero que muchos no alcanzan a ver y menos entender y tampoco se atreven a señalar la responsabilidad oficial.
Está claro que la prioridad del Estado mexicano y de sus instituciones es la defensa de la vida, la salud, los bienes y las libertades de los ciudadanos.
Por eso, en tanto razón de ser del Estado, el ciudadano está en el centro de toda la responsabilidad del gobierno, sea el de AMLO o cualquier otro.
Pero si vamos a las cifras de muerte, por violencia, salud, robo, asalto, secuestro… veremos que el de AMLO es un gobierno que no refleja esa prioridad.
Es decir, que con López las instituciones del Estado son omisas a sus responsabilidades básicas, por tanto es un gobierno fallido.
Y es que según cifras oficiales, en casi 24 meses de pandemia han muerto en México 320 mil ciudadanos que no recibieron la atención adecuada por parte del sistema de salud.
Eso quiere decir que –en el supuesto de que una familia se compone de tres integrantes–, han vivido la peor tragedia imaginable –la muerte de un ser querido–, un millón de ciudadanos.
Pero la cifra es de terror si vamos a las muertes no oficiales, que rondan los 600 mil mexicanos muertos a causa de la pandemia. Entonces la tragedia alcanza a dos millones de mexicanos.
Peor aún, si en los dos primeros años de la pandemia se han reportado de manera oficial 320 mil muertos, entonces resulta que el ineficaz gobierno de López es responsable de siente mil 400 casos iguales al de la muerte de los 43 de Ayotzinapa. Sí, en 38 meses López habría sido culpable de mil 400 veces la tragedia de Iguala.
¿Se imaginan repetir el crimen de los 43, en siete mil 400 veces?
Ese es el tamaño de la tragedia y del crimen de Estado que hemos vivido en el gobierno de López Obrador.
A su vez, en la llamada “matanza de Tlatelolco” se estima que fueron asesinados 325 jóvenes en la represión de 1968.
Si en los primeros 24 meses de pandemia han muerto 320 mil mexicanos a causa del mal manejo por parte del gobierno de López, entonces se ha repetido casi mil veces la “matanza de Tlatelolco”.
Poro los ataques a las Torres Gemelas, como ya se dijo –por ahí de tres mil muertos según cifras oficiales–, entonces los 320 mil muertos en México a causa de la pandemia significan cien veces el ataque a las Torres Gemelas.
Y así podemos seguir enumerando los muertos a causa de la falta de medicinas; producto del crimen; periodistas muertos; feminicidios…
Los datos duros confirman que el presidente mexicano es uno de los mayores criminales del mundo y, sin duda, el mayor criminal de Estado en la historia de México.
Al tiempo.
Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.