La tercer columna

Ya gané, ¿ahora qué sigue?: los desafíos y la ruta crítica para la nueva presidenta de México

El ascenso de Claudia Sheinbaum a la presidencia de México marca un momento histórico lleno de expectativas y promesas de cambio. El haber ganado en las urnas no solo simboliza un cambio político, sino también una esperanza renovada para millones de ciudadanos que anhelan un futuro mejor. Con su victoria, Sheinbaum no solo ha roto barreras de género, sino que también ha heredado un país cargado de tareas pendientes y desafíos monumentales.

Con su llegada al poder, la primer mujer que llevará las riendas de México desde el más alto encargo, enfrenta un país dividido y plagado de problemas económicos, sociales y de seguridad. Enfrentar estos desafíos requerirá un liderazgo fuerte y decidido, capaz de implementar reformas estructurales y construir un consenso nacional. En medio de un panorama complejo marcado por la desigualdad, la violencia y la incertidumbre económica, Sheinbaum enfrenta la monumental tarea de guiar a la nación hacia un camino de estabilidad y prosperidad.

En una nación que clama por justicia social, estabilidad económica y seguridad, la nueva presidenta se enfrenta a una encrucijada crucial. Ahora, la pregunta que resuena en la mente de millones de mexicanos es: «¿Qué sigue?». En esta entrega exploramos los grandes desafíos que deberá enfrentar Sheinbaum en los terrenos económico, político, de seguridad, educación, salud y reducción de la pobreza y esbozamos una ruta estratégica para su gobierno en los próximos años para encarar estos retos con decisión y eficacia. La magnitud de estos desafíos es inmensa, pero también lo es la oportunidad de transformar a México en una nación más equitativa, próspera y justa.

Economía: reactivar el crecimiento y reducir la desigualdad

La economía mexicana ha mostrado señales de recuperación tras la pandemia, pero el crecimiento del PIB del 2.5% en 2023 refleja que aún hay mucho por hacer. La desigualdad sigue siendo un problema grave, con un coeficiente de Gini de 0.45, indicando altos niveles de disparidad económica. Además, la Inversión Extranjera Directa (IED) alcanzó los $31.6 mil millones USD en 2023, una cifra que, aunque positiva, necesita ser mejorada. Para abordar estos problemas, se requieren reformas fiscales que aumenten la recaudación sin afectar a los más vulnerables. Fomentar el desarrollo de sectores clave como tecnología, energías renovables y turismo será esencial para dinamizar la economía. Crear un entorno favorable para la inversión a través de la estabilidad política y económica también será crucial. La administración de Sheinbaum deberá trabajar estrechamente con actores clave como la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Banco de México, así como con el sector privado, para asegurar una recuperación sostenida y equitativa.

Política: superar la polarización y fortalecer las instituciones

Las elecciones de 2024 mostraron una alta polarización, violencia política generalizada en el país y una oposición que aún no le encuentra la cuadratura al círculo. El partido oficialista ganó con un margen de victoria muy amplio, reflejando la profunda división en el país que no muestra signos de revertirse en el corto plazo. México ocupa el lugar 124 de 180 en el índice de percepción de corrupción de Transparencia Internacional, lo que evidencia la necesidad de reformas en el sistema político. Fomentar el diálogo y la reconciliación nacional será vital para superar esta polarización. Se deben implementar reformas que aumenten la transparencia y la rendición de cuentas, fortaleciendo las instituciones democráticas y asegurando su independencia. El Instituto Nacional Electoral (INE), el Poder Legislativo y la sociedad civil jugarán roles críticos en este proceso. La administración debe trabajar para construir puentes entre diferentes sectores políticos y sociales, promoviendo el diálogo y la participación ciudadana.

Seguridad: combatiendo la violencia y la impunidad

La tasa de homicidios en México fue de 29 por cada 100,000 habitantes en 2023, y la impunidad en casos de homicidio supera el 90%. La violencia y el crimen organizado siguen siendo problemas graves que afectan la calidad de vida y la estabilidad del país. Una estrategia integral de seguridad que combine prevención, inteligencia y fortalecimiento de las fuerzas de seguridad es necesaria. Además, se debe fortalecer el sistema judicial para asegurar la rendición de cuentas y la justicia, esto con el aderezo que le pone la propuesta de reforma que pretende la elección popular, como si de la selección de la reina de la primavera fuese, de los ministros, magistrados y jueces, lo cual pone en grave riesgo que casi cualquier persona quede a cargo de la impartición de justicia. Será esencial trabajar con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, la Guardia Nacional y la Fiscalía General de la República para desarrollar y ejecutar una estrategia efectiva de seguridad.

Educación: mejorar la calidad y garantizar el acceso universal

México ocupa el lugar 53 de 77 países en el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA), y la tasa de deserción escolar en nivel medio superior es del 15%. Mejorar la calidad de la educación a todos los niveles y garantizar el acceso, especialmente en zonas rurales y marginadas, son desafíos urgentes. La reforma educativa debe modernizar el currículo y mejorar la capacitación docente. Además, se debe invertir en infraestructura escolar para asegurar que todas las escuelas cuenten con las condiciones necesarias para una educación de calidad. La Secretaría de Educación Pública (SEP) y los gobiernos estatales serán actores clave en la implementación de estas reformas. Asimismo, será crucial el apoyo de los sindicatos de maestros y las organizaciones de la sociedad civil para asegurar una educación inclusiva y de alta calidad.

Salud: fortalecer el sistema y enfrentar las enfermedades crónicas

México invierte solo el 5.5% del PIB en salud, por debajo del promedio de la OCDE. La diabetes y la hipertensión afectan a más del 10% de la población adulta, subrayando la necesidad de un enfoque preventivo y de educación en salud. Avanzar hacia un sistema de salud universal y equitativo será fundamental. Implementar programas de prevención y educación en salud ayudará a reducir la incidencia de enfermedades crónicas y emergentes. La Secretaría de Salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) deberán coordinar esfuerzos para mejorar la cobertura y la calidad de los servicios de salud. Además, la colaboración con organizaciones civiles y comunitarias será crucial para implementar programas de prevención efectivos.

Reducción de la pobreza: combatir la pobreza extrema y la desigualdad social

Alrededor del 40% de la población mexicana vive en pobreza, con un 7% en pobreza extrema. La desigualdad social se refleja en la falta de acceso a servicios básicos como salud, educación y vivienda. Ampliar y mejorar los programas sociales existentes, asegurando su correcta implementación, será crucial para reducir la pobreza. Promover el desarrollo económico sostenible que beneficie a todos los sectores de la sociedad también será esencial. El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), la Secretaría de Desarrollo Social y los gobiernos locales jugarán roles importantes en la implementación y supervisión de estos programas. Será necesario un enfoque multidimensional que abarque no solo la transferencia de recursos, sino también la creación de oportunidades económicas y sociales para los más desfavorecidos.

Conclusión

Gobernar a México en la actualidad es un ejercicio de navegación en un mar de complejidades. Los desafíos económicos, sociales y políticos están interconectados y requieren soluciones integrales. Gobernar en tiempos contemporáneos requiere no solo de liderazgo fuerte sino también de una visión clara y un compromiso inquebrantable con la justicia social y el desarrollo sostenible. Gobernar a México hoy significa reconocer y abordar las profundas disparidades que afectan a millones de ciudadanos. Este compromiso implica no solo implementar políticas redistributivas, sino también asegurar que los sistemas de salud, educación y justicia sean accesibles y efectivos para todos.

Claudia Sheinbaum deberá mostrar una gran habilidad para coordinar esfuerzos, fomentar el diálogo y mantener la estabilidad. Su administración deberá ser flexible y adaptativa, capaz de responder a las demandas inmediatas sin perder de vista los objetivos a largo plazo. El éxito de su gobierno dependerá de su capacidad para mantener este delicado equilibrio.

El mandato de Claudia Sheinbaum como presidenta de México representa una oportunidad única para abordar los desafíos estructurales que enfrenta el país. La ruta crítica propuesta requiere un enfoque integral y colaborativo, con políticas públicas que promuevan la inclusión, la justicia y el desarrollo sostenible. El éxito de su administración dependerá de su capacidad para implementar reformas efectivas y construir consenso en torno a los objetivos comunes de progreso y bienestar para todos los mexicanos. En tiempos de creciente desigualdad y polarización, el mandato de Claudia Sheinbaum debe centrarse en la justicia social. Sheinbaum tiene la oportunidad de establecer un legado de equidad y justicia que podría redefinir el futuro de México. La construcción de un México unido y fuerte es el mayor reto y, a la vez, la mayor promesa de su mandato.Nos saludamos pronto.

Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.