Ráfagas: Saqueo en Tepeji
Arquitectura, artes visuales y escénicas, artesanías, cine, diseño, editorial, investigación y desarrollo, juegos, moda, música, publicidad, software, televisión, radio, internet y videojuegos son algunos de las actividades que forman parte de la economía creativa, se estima que representa el 6% de la economía mundial tendencia que se ha incrementado con el uso de las TICs que la pandemia aceleró.
En la CDMX en el 2017 lanzó “Sondeo Creativo” una encuesta piloto que nos dió una percepción de la economía creativa en la capital del país, donde las respuestas nos mostraron que la mayoría estaba en la informalidad, que eran felices con su trabajo, pero que los ingresos no eran los idóneos.
En el Estado de Hidalgo la Secretaria de Cultura generó la Red de Emprendedores Creativos, una estrategia para mapear y profesionalizar a personas que se desenvuelven en la economía creativa lo que representa un buen primer paso, sin embargo, la red no ha podido mapear, regularizar y profesionalizar a la mayoría de los emprendedores creativos. Fortalecer la red y darle continuidad será importante para incentivar este aspecto de la economía.
La mayoría de las personas leen este espacio desde un smartphone y una app, estos dos aspectos presentan diseño de software y si lo pensamos cada vez consumimos más productos y servicios vinculados a la creatividad.
El desarrollo de software vinculado a aspectos comunes de nuestra vida son parte de esta economía, los asistentes personales, relojes inteligentes, aplicaciones, etc. De las 10 empresas más valiosas del mundo en el 2021, 8 de ellas están relacionadas directamente con la economía de la creatividad, de igual manera los empleos relacionados con ella son los que generan mayor movilidad social.
La economía de la creatividad es una ventana de oportunidad que podría permitir desarrollar industrias creativas que no requieren tanta inversión, infraestructura o inversión para crecer.
Debemos dejar de pensar bajo esquemas tradicionales, la sociedad y el mercado cambian muy rápido de manera casi caótica, ante cambios variados e inmediatos se deben aplicar nuevas perspectivas y desarrollar estrategias diferentes, la economía de la creatividad es una posibilidad y realidad que debemos explorar.
Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.