Ráfagas: Carmen Rincón, a la Secretaría de la Mujer
«Un error bien atendido es la mejor oportunidad para fidelizar a un cliente»: Jürgen Klaric
Graves problemas afectan a las empresas públicas –locales y nacionales– comenzando por el Sistema de Transporte Colectivo-Metro, cuya inseguridad es motivo de insomnio cuando no de lesiones y causa hasta de muerte, por los accidentes, llevamos siete en la actual administración, y aunque el secretario general del gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, diga que no se trata de un asunto de disminución del presupuesto, los datos indican lo contrario.
Entre 2018 y 2021, el presupuesto del Metro ha disminuido en 3 mil millones de pesos, lo que explica en parte la insuficiencia en el mantenimiento y la modernización de sistemas de control, también la falta de sustitución de material móvil y fijo deficiente, y ni hablar de recuperar la calidad mundial que alguna vez tuvo el Metro capitalino, clasificado como clase mundial alguna vez, hace más de tres décadas. Por su seguridad y eficiencia, llegó a estar entre los cuatro primeros lugares de un centenar de metros existentes en el mundo.
Durante la presente administración de Claudia Sheimbaun, precandidata presidencial de Morena a la presidencia de la República, ya suman siete accidentes graves: en 2020, la colisión de dos trenes en Tacubaya, por una falla de energía; en 2021; el incendio en el Puesto Central de Control, la quema de un tren en Indios Verdes, una avería en la estación Escuadrón 201 y el colapso de la Línea 12. En lo que va del 2022, el cortocircuito que provocó un incendio entre Xola y Villa de Cortés y el reciente choque de los trenes que ocurrió esta semana en La Raza.
La señora Sheinbaum anda más preocupada por cuidar su imagen realizando costosos viajes de proselitismo, por cierto ilegales, al interior del país, publicitando que ya tiene pareja, en lugar de orientar su energía a resolver la compleja problemática que aqueja a los habitantes capitalinos. ¿Será porque hasta el momento las tragedias en el Metro se suceden sin consecuencias para los responsables? Cuántas más ocurrirán sin cumplir con el compromiso del gobernante de brindarles seguridad a sus gobernados.
La impunidad siembra en los responsables la ausencia de consciencia, la falta de sanción –penal o civil– a quienes resulten responsables de los accidentes por faltas administrativas, técnicas u operativas sólo hace que se sigan presentando percances y con ello se multiplica el número de víctimas, quienes además tienen que padecer engaño en las argumentaciones absurdas, injusticia y falta de reparación del daño.
Por eso México es uno de los países con alto grado de impunidad a nivel global, los gobiernos de Morena llamados de la 4T también adolecen de compromiso en cumplir con garantizar un servicio público eficiente, una administración de los recursos públicos transparente. Tampoco se ve que exista preocupación gubernamental por elevar los niveles de eficiencia en el sistema de justicia. En general carecen de estudios de prospectiva y de una estrategia de largo plazo.
Dice bien la senadora Xóchitl Gálvez, quien junto con legisladores de oposición demandó justicia para las víctimas de los accidentes en el Metro: «En la Ciudad de México, capital del país, centro económico y político de México, no debe permitirse la normalización de tragedias como las que han ocurrido en el Metro, sin que exista la imputación de responsabilidades e, igualmente grave, sin que se adopten las medidas para evitarlas, apostando al olvido y a la necesidad que tienen los habitantes de transportarse».
La CFE y sus amagos a usuarios cautivos
Imagínese que a usted le ocurre: a las 9 de la mañana suena el timbre de casa, la voz de un hombre le anuncia: “CFE, vengo a cortar la luz…”. ¿Cómo?, le pregunta el consumidor, por qué si estamos al corriente de los pagos, además, dónde está la orden de suspensión… No hay respuesta, sale corriendo y el empleado de la CFE ya está manipulado el medidor y sólo le reitera que el motivo del corte es por “asuntos administrativos…”.
Le muestra los recibos de pagos realizados. Sin verlos, el hombre sin uniforme de la CFE, ni gafete a la vista, señala: “son ajustes de consumo, no de pagos”. No, no puede hacer eso, sin orden de por medio, se le responde. El tipo ríe y dice “pues ya lo corté…, son órdenes”. ¿De quién? No sea abusivo, le increpa el usuario. A ver, deme su nombre. “Daniel Rosales”, dice medio mostrando una credencial, y agrega: “Ni le mueva, no sabe con quién se está metiendo”, responde altanero, el empleado de la CFE.
Daniel Rosales se comporta como un energúmeno, usó su 1:80 de estatura y su sobrepeso para, ensoberbecido, mostrarse prepotente y amenazar con golpear al consumidor. Finalmente, se limita a mentarle la madre, a lo que el reclamante respondió de igual manera. Se dio la media vuelta y fue lanzando improperios.
Aquí comienza la otra historia, ir a la sucursal más cercana de la CFE, ubicada en División del Norte 1305, colonia Rosedal, donde a una de ejecutiv se le presenta la queja y luego de que ella aceptara que tienen trabajadores “muy prepotentes”, pero que no podían hacer nada, ni con él ni con la arbitrariedad del corte sin sustento, a pesar de no existir orden. Recomendó que lo mejor que podía hacer el quejoso era ir a la central, donde “sí tienen toda la información”, ubicada en plaza 0asis. ¿No le parece absurdo que una compañía que se presume «clase mundial» no cuente con una red en línea ni empleados para resolver estos casos?
El consumidor tuvo que acudir a Plaza 0asis, fue acompañado por su esposa, ahí los atiende otro Ejecutivo de la Central Coyoacán, quien les muestra un documento fechado el 5 de enero (DN100 COY 1338), firmado por Martín López, jefe de oficina en Coyoacán, Zona Universidad, en donde supuestamente se informó al consumidor que irían a su domicilio para revisar su medidor, ya este presentaba registros muy bajos. Y se describe a una persona “de 1.70, moreno y de barba cerrada” quien recibió dicho aviso. Esto es falso, nunca se presentó este «Aviso de Revisión», nunca.
Pero sí, el sábado 7 de enero, a las 10:45 horas, se presentó un hombre mayor con 7 u 8 medidores y con el aviso a una de las inquilinas afectadas del condominio en que habita el denunciante, procedió a quitar la luz y cambiar los medidores digitales que la CFE había instalado a finales del año 2021, explicó que la CFE hizo una compra de estos aparatos en 2021 y resultaron todos mal, no registran el consumo, por lo que procederán a cambiar, “son miles en la alcaldía Coyoacán”, aseguró.
Regresando a este miércoles 11, cabe decir que en la Central de la CFE de Plaza Oasis, Flora Elizabeth 0suna y Emmanuel 0lvera, funcionarios de esa oficina atentos y preocupados por la situación, explicaron que a causa del mal funcionamiento de ciertos medidores se habían hecho cobros por debajo del consumo, pero que ahora la CFE había ordenado un «Ajuste» de todos los que pagaron por debajo de su consumo histórico, por lo que o se paga lo que ellos «ajustaron» o se corta el servicio, cinco días después de recibir notificación del «Ajuste».
El quejoso de la colonia El Rosedal y su esposa argumentaron que no es adjudicable a los consumidores la falla, pero dado que hubo oídos sordos a este argumento y que se les reiteró la amenaza de que o aceptaban hacer ese pago o se les cortaría la luz, y dado que no hay otro prestador de ese servicio, los usuarios de la CFE tuvieron que aceptar «voluntariamente» un acuerdo de cuatro pagos diferidos del «adeudo» por miles de pesos.
Finalmente, en Plaza Oasis se les expidió una orden para reestablecer el servicio. Luego de otra vuelta a la sucursal de División del Norte y de hablar con un accesible Luis Saldaña, y dos vueltas del instalador de la CFE, se logró que a las 15:30 horas se restableciera el servicio.
Los servicios públicos van en decadencia, sin duda, llámese el transporte público como es el Metro o el servicio eléctrico que es administrada por la CFE, dirigida su «transformación» por un dinosaurio del viejo sistema, Manuel Bartlett. La mala administración de éstos y otros quita la tranquilidad, el sueño y hasta la vida.
¿Qué podemos hacer los usuarios? ¿una denuncia pública? ¿Quién pondrá remedio? Recordemos a la hora de votar que sólo nosotros podemos hacer el cambio. Ya basta de aceptar los excesos de gobernantes que aceptan argumentos inadmisibles, como eso de mantener la pobreza como forma de control o estrategia político-electoral o de quienes usan el dinero del mantenimiento para hacer propaganda.
Qué tal si analizamos esta frase: “No olvidemos que empobrecer a la gente no es un asunto personal, es una estrategia política.. ya que ayudando a los pobres va uno a la segura, porque ya sabe de que cuando se necesite defender… la transformación, se cuenta con el apoyo de ellos»: AMLO.
Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.