Piña llamó, porque ignora límite entre privado y público

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Conocer los límites del derecho, ¿Los conoce la ministra Norma Piña? ¿qué pensarían ustedes si un alto funcionario los llamara por teléfono e involucrara a sus hijos en su comportamiento? Por lo pronto dudarían que fuera realmente el funcionario el que da su nombre. Si tuvieran cierta certeza de que realmente lo fuera, les sorprendería quizá, que un ente público mezclara los asuntos de esa naturaleza en una llamada privada. Y finalmente se indignarían de que una pregunta  fuera para mezclar a sus hijos. Hay muchas discusiones teóricas en torno a ese problema y normalmente se suele aceptar que cuando un funcionario público mezcla sus funciones con asuntos privados, éstos se convierten en públicos y puede  venir la sanción. A Luis Almagro casi le cuesta la secretaria de la OEA  hace poco, por andar con una secretaria y mezclar sus asuntos sentimentales con los asuntos externos.  El caso todavía se discute. En algunos de los procesos que están en curso en este momento como el de Emilio Lozoya, evidentemente hubo mezcla privada de familias con los asuntos públicos, para saquear a Pemex. Pero que la recién electa presidenta de la Suprema Corte no solo se identifique sino que haga una pregunta insultante al presidente del Senado, Alejandro Armenta, en la que, entre otros asuntos mezcla a sus hijos, evidencia que desconoce los límites entre lo privado y lo público.  Hay una traslación de la función pública a la esfera privada y llama la atención. Y con la aceptación que ella ha hecho de esa llamada, la ley se pone a funcionar ¿Debe aparecer la sanción?

LAS PRIMERAS DAMAS, MEZCLA PRIVADA CON PÚBLICA Y USO DE RECURSOS

Otros casos de mezcla de lo público con lo privado es el de las llamadas primeras damas. A partir de una relación civil, se introduce a un personaje extraño en la vida publica incluyendo uso de espacios públicos y de recursos del erario. Está claro que eso tiene mucho que ver con el autoritarismo predominante en un sistema ¿Quien se va a oponer sin que sea severamente castigado, a que un presidente lleve a su  familia a vivir a la sede oficial, sin que pague lo que ello significa? Y que su primera dama mande construir una mansión con recursos públicos con una empresa contratada por la propia presidencia.

SHAKIRA Y EL USO PRIVADO PARA GOLPEAR PÚBLICAMENTE

Ya hemos mencionado el caso de la cantante colombiana Shakira, que está sujeta a una  investigación en una universidad española para profundizar en las posibles violaciones que ha cometido a través de sus canciones. Con insinuaciones de sus nombres, la cantante se ha referido a su ex marido Gerard Piqué  y a su nueva novia Clara Chía dentro de un caso que ya repugna por los despechos de Shakira y la desagradable exposición de los conceptos convencionales de la traición, como si los seres humanos no tuvieran vida propia.  Pero además hay en el despliegue publicitario que ha sido mundial y que le puede costar caro, la mención a empresas importantes a las  que desvaloriza en algunos de sus productos como relojes y carros, exponiendo la calidad de esos productos que menciona. El despliegue público de la cantante no solo por la exhibición abierta de  sus eventos sino por la traslación de lo privado a lo público a diversos países, convierte un simple hecho como es la separación conflictiva de una pareja, en un caso externo. Las leyes al respecto son similares en todos los países porque parten de principios universales, además de que la ONU a través de la Unesco los señala. Es muy grave, además, cuando están de por medio menores de edad.

LA MINISTRA PIÑA DEBIÓ CONVOCAR AL CONSEJO DE LA JUDICATURA

Como  presidenta que es del Consejo de la Judicatura, la ministra Norma Piña debió convocarlo para plantear los problemas que han surgido ante las críticas acerbas a su poder. El ejecutivo, los legisladores, medios y el ciudadano en general no han hecho sino expresar lo que piensan de un poder judicial cuya actuación es controvertida. Hay decenas de casos como ejemplo ¿Cual será el efecto de su llamada? Ya veremos.

Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.