¿Preparados para Kamala o Trump?
PACHUCA, Hgo., 9 de enero de 2016.- Las protestas generadas en Hidalgo en contra del gasolinazo y las acciones de violencia y saqueo derivadas de estas, pusieron a prueba a las autoridades que conforman el nuevo gobierno del estado y a quienes integran los 84 ayuntamientos de la entidad, pues mientras en algunos municipios la inconformidad ciudadana de expresa de manera pacífica, en otros, el enojo de la población ha sido la oportunidad para que delincuentes y grupos de rateros de ocasión, salgan a las calles vandalizar comercios.
Así ocurrió ésta semana en diversos municipios, especialmente en los que conforman la región de Tula-Tepeji y en algunos del Valle del Mezquital, donde a las protestas que se expresaron con el cierre de carreteras y autopistas, la toma de casetas de peaje, oficinas gubernamentales, bancos y algunas gasolinerías, se sumó el desmantelamiento de tiendas de conveniencia OXXO o el saqueo sin control de establecimientos de autoservicio como Aurrera, Comercial Mexicana, Soriana y tiendas departamentales como Coppel.
Pese al desorden que se vivió en algunos lugares, a la “noche de terror” como los vecinos de Mixquiahuala y Progreso de Obregón calificaron la madrugada del 4 de enero, el secretario de Gobierno de Hidalgo, Simón Vargas Aguilar presumió ante los medios de comunicación que la situación estaba 95% bajo control y calificó como no graves los hechos que hasta ese momento se habían suscitado en la entidad.
Justo en el momento en el que el funcionario aseguraba ante la prensa que todo estaba bajo control, un grupo de vándalos incendiaba una tienda OXXO en el Jiadi y horas más tarde se saqueaba de manera impune en Tlahuelilpan, una tienda Aurrera, la única de autoservicio que se había salvado en la región. O el secretario Simón minimizó los hechos o alguien de su equipo le oculta la información; pero cuando él creía que todo estaba bien, las cosas iban empeorando cada vez más.
NO PASA LA PRUEBA…
Quienes definitivamente no pasan la prueba y mostraron absoluta ineficacia para proceder ante la situación, son los responsables de la seguridad pública en el estado, el secretario Mauricio Delmar Saavedra y el coordinador de seguridad estatal, Uriel de Jesús Moreno Castro, pues los saqueos se hicieron con total impunidad y en absoluta ausencia de la policía, lo que puso en evidencia que hubo demasiada tolerancia hacia los actos delincuenciales, lo cual es muy grave, pero lo sería más si se tratara de una complicidad para dejar actuar.
Resulta por demás sospechoso que pese a las millonarias pérdidas para el comercio, la policía no se hiciera presente para frenar los saqueos; es más en casos como el ocurrido en Tlahuelilpan, desde muchas horas antes de ocurrido el saqueo en Aurrera, ya se sabía que eso iba a ocurrir; vecinos de la localidad integraron un grupo de protección y defensa para evitar que fuera robada la tienda de autoservicio, la cual defendieron exitosamente la tarde del miércoles, pero cuando la gente comenzó a retirarse, llegaron los vándalos y se llevaron lo que pudieron sin que los subordinados de Delmar Saavedra hicieran algo por evitarlo.
Un ejemplo de que sí era posible frenar los saqueos se dio en el municipio de Tula de Allende, ahí un grupo de encapuchados secuestró una pipa de combustible y regaló la gasolina, inició el saqueo de Soriana y después de Coppel, en cuanto la policía municipal se enteró, arribaron patrullas al mando del comandante Fermín Hernández, bloquearon las salidas, detuvieron a muchos saqueadores, aseguraron vehículos y recuperaron parte de lo robado para poner a los presuntos delincuentes y a la mercancía a disposición del Ministerio Público.
Eso es lo que no hizo el personal de Seguridad Estatal y resulta muy sospechoso; O Seguridad Pública del Estado es cómplice o es incompetente, amas cuestiones son delicadas.
¿QUIÉN LOS MATÓ?…
Lo que sí hicieron los elementos de seguridad pública del estado, fue disparar contra civiles durante el fallido intento por desbloquear la carretera México-Laredo a la altura de la comunidad de Dios Padre en Ixmiquilpan; los videos difundidos ampliamente confirman que en cuanto inician los disparos contra la multitud, comienzan a caer los manifestantes heridos, dos de los cuales fallecieron víctimas de las balas.
¿Quién disparó o quién los mató?, eso debe ser definido por la Procuraduría General de Justicia del Estado, pero según la población fueron “los federales”, aunque en el operativo participaban únicamente elementos de seguridad pública del estado.
Un comunicado anónimo hecho llegar a diversas redacciones via correo electrónico y por grupos de whats app, supuestamente emitido por personal de la dependencia, acusan a sus superiores de incompetencia en la operatividad, de no saber nada de su trabajo y de haber dirigido erróneamente el operativo quie terminó con dos muertos por parte de los manifestantes.
Pero ese mismo escrito también insinúa que hubo policías heridos, fallecidos y desaparecidos, lo cual suena muy lógico porque en el zafarrancho hubo patrullas detenidas y destruidas, que seguramente no se manejaban solas, así es que deben aclararse ambas situaciones; quien dirigió el operativo, quién disparó y dónde están los uniformados que conducían esas unidades.
OPORTUNISTAS…
Y como en todo conflicto, siempre hay quien aprovecha la situación para hacerse notar y llevar agua a su molino; éste domingo el ex-diputado federal Gerardo Fernández Noroña acudió a Ixmiquilpan para alentar a la gente a mantener la resistencia civil pacífica; está en su derecho y además tiene razón, pero nadie puede negar que lo hace porque ya está en campaña para el 2018.
El ex-senador José Guadarrama Márquez, también aprovecha la ocasión y difunde ampliamente un video en contra del gasolinazo, que bien que lo haga, pero que mal que mucha gente no le crea, basta con buscar en la internet toda la información del llamado Pemexgate, para saber el porqué en el caso de Pepe el chiste se cuenta solo.
También algunos presidentes municipales han decidido subirse al tren del gasolinazo y sumar puntos a su favor, aunque no todos con éxito. El ayuntamiento de Tlaxcoapan emite un exhorto al Congreso de la Unión para dar marcha atrás a la reforma fiscal, con lo cual equivale a tronar un cuete aunque este no se escuche ni con el vecino de al lado.
Por su parte las alcaldías de Tezontepec de Aldama y Mixquiahuala de Juárez, anuncian que interpondrán un amparo colectivo contra la injusta medida y parece que ellos sí le han encontrado la cuadratura legal. Ese proceder será interesante y podría ser muy exitoso, no hay que perderlo de vista.
Twitter: @JoelSanRadar