Ráfagas: Otra más de la CAASIM
Causa sorpresa.
Pero le informo lo cierto:
Se ha unido todo el magisterio en la actual negociación salarial con un planteamiento único: 9 por ciento directo al salario.
Son tres frentes:
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) de Alfonso Cepeda, titular del Contrato Colectivo de Trabajo.
También la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), de dirigencia amorfa pero aliada del actual gobierno desde la rebelión.
Y por supuesto el Sindicato de Trabajadores para la Educación (STE) de Carlos Jonguitud Carrillo, con fuerza creciente y con interlocución presidencial directa.
La negociación se hace de manera directa en Palacio Nacional, a donde son citados por Leticia Ramírez Amaya, directora general de Atención Ciudadana.
Pero hay una voz dominante en Palacio Nacional para todos los asuntos magisteriales -¿para cuáles no?-: Julio Scherer Ibarra, director jurídico de la Presidencia.
NUEVO MODELO LABORAL
Hay tiempo para los acuerdos.
Además del incremento salarial, son posibles arreglos para equilibrar condiciones laborales y percepciones económicas, pues en muchos lugares se han quedado rezagadas.
Los acuerdos quedarán definidos por el avance del diálogo y el tiempo.
Tradicionalmente se emplea el Día del Maestro, el 15 de mayo, para hacer los anuncios y casi siempre con efectos retroactivos a enero.
Las voces y actitudes conciliadoras corren a cargo, quién lo duda, de Alfonso Cepeda y Carlos Jonguitud Carrillo.
Pero ahí la CNTE no es tan incisiva y violenta como lo era con los gobiernos anteriores, aunque queden resabios en Guerrero, Michoacán, Chiapas y, en menor medida, en Oaxaca.
Pero está representada.
Han acudido, por ejemplo, enviados de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG).
También Gamaliel Guzmán y Víctor Zavala por administrativos y profesores de Michoacán.
Los registros de Palacio incluyen a Hiram Santiago y Eloy López por el profesorado de Oaxaca.
Y como los chiapanecos se mandan solos y traen un desastre, son representados por gente designada por su colectivo.
A ver hasta dónde llegan estas sorpresivas y plurales negociaciones inimaginables en el pasado.
ACUERDOS DE YUCATÁN
Es la crónica de una candidatura anunciada.
Jorge Carlos Ramírez Marín dejó su escaño en Senado de la República para buscar la alcaldía de Mérida.
La elección será en junio próximo y en ella se juega su máxima ambición: ser gobernador de Yucatán.
Para suceder al panista Mauricio Vila debe ganar en 2021, tarea a la cual ha involucrado a varios actores.
Ha dejado espacios para cuadros priístas con activos para mantener unido al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y así tuvo espacio Pablo Gamboa Miner.
El hijo de Emilio Gamboa va para diputado por el Tercer Distrito y la alianza se piensa más allá: en 2024 Ramírez Marín para gobernador y Gamboa Miner para edil.
Pero todos lo saben: sin un 2021 victorioso no habrá un 2024 promisorio.
Acción Nacional (PAN), o sea Mauricio Vila, apuestan por la reelección de Renán Barrera, mientras Morena no ha podido decidir candidatos por problemas internos. para gobernador y Gamboa Miner para edil.