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PACHUCA, Hgo., a 28 de julio de 2020.- “Nosotros le llamamos”, es la respuesta que reciben algunos beneficiarios de las despensas del programa Hidalgo te Nutre que fuera implementado para la distribución de productos de la canasta básica a personas vulnerables.
De acuerdo al plan, una vez que recibieran la primera despensa, serían llamados en dos ocasiones posteriores para recibir una segunda y una tercera dotación, lo cual, reportaron, no ha sucedido.
Para Quadratín Hidalgo habló un grupo de adultos mayores que llamaron al número del Operativo Escudo para solicitar el apoyo y en distintas situaciones, una de ellos no recibió la ayuda hasta el momento y le han dicho que está en espera. Francisca, de 68 años, viuda, dedicada al comercio informal y que vive sola dijo que le atendieron, en un principio, de mala manera y le colgaron el teléfono, “una señorita me dijo: ¿a usted quién le dio este número? Deme su clave CURP, y como no la tenía, me dijo, muy grosera, pues entonces llame cuando tenga los requisitos y colgó”.
Señaló que luego le respondió alguien más de forma más amable y le dijo que esperara una llamada para acudir por su apoyo, pero, a pesar de que llamó desde finales de mayo, hasta el momento sólo recibió ayuda extraordinaria por parte de los propios funcionarios que, dijeron, no equivale a la ayuda gubernamental del programa Hidalgo te Nutre.
María Elena, en tanto, dijo que es ama de casa y sólo recibió la primera despensa, pero, tras un mes y medio, no le han vuelto a llamar. Expone que su esposo trabaja por su cuenta haciendo trabajos de albañilería, pero por la pandemia su trabajo se ha visto afectado, pues no lo llaman para laborar.
De 60 y 65 años, señalan que no cuentan con más ingresos que los que tiene su esposo, pues sus hijos, ya casados, no viven en Pachuca. Se sintieron afortunados porque a los dos días de solicitar su despensa, les llamaron para la entrega del beneficio, aunque les pareció extraño que, aunque proporcionaron su domicilio, a unos pasos del CRIH, la despensa la recibieron en la Casa de las y los Adolescentes, por lo que uno de ellos tuvo que trasladarse en transporte público al lugar.
Amalia, de 62 años y discapacitada, dijo que es de San Bartolo y le fue complicado trasladarse hasta las instalaciones del CRIH, teniendo que transbordar para acudir por su despensa, de la cual también recibió sólo una de las tres dotaciones y, como sus iguales, espera saber qué trámite continuar para recibir el resto del apoyo.