Impulsan participación de mujeres indígenas en política de sus pueblos

PACHUCA, Hgo., 18 de marzo de 2020.- “La participación política de las mujeres no es cuestión de moda, no es una cuestión aislada, es uno de los derechos que tenemos las mujeres, pero tardó mucho tiempo en reconocerse”, afirmó la titular del Instituto Hidalguense de las Mujeres (IHM), María Concepción Hernández Aragón.

No obstante, afirma la funcionaria, a partir del reconocimiento del voto de las mujeres y sus derechos político electorales, la participación fue bloqueada debido a que el poder es un espacio destinado y conceptualizado para los hombres, por lo que el ejercicio de estos derechos resultó complejo.

Ante este panorama, el IHM acerca capacitación y difusión en materia de derechos de las mujeres a funcionariado, organizaciones, instituciones gubernamentales y políticas e incluso a organismos privados, a fin de avanzar hacia la igualdad sustantiva y el empoderamiento de las mujeres, incluyendo su acceso a los espacios de toma de decisiones.

“La participación política de las mujeres es un derecho humano, cuyo ejercicio ha pasado por un largo proceso, desde el reconocimiento del derecho al voto hasta la paridad electoral, hoy establecida en la Constitución. Sin embargo, sigue siendo complejo aplicarlo por la discriminación histórica contra las mujeres, ya que el quehacer público se consideraba un espacio destinado a hombres; esta resistencia dio lugar a otro grave problema: la violencia política contra las mujeres por razones de género”, explica.

Este tipo de violencia, dijo, comprende todas aquellas acciones y omisiones de personas, servidoras o servidores públicos que se dirigen a una mujer, que tiene un impacto diferenciado en ellas o les afectan desproporcionadamente, con el fin de menoscabar o anular sus derechos político electorales, incluyendo el ejercicio del cargo y puede incluir, entre otros, violencia física, psicológica, simbólica, sexual, patrimonial, económica o feminicida.

En el caso de las mujeres indígenas, la situación se agrava con los usos y costumbres que prevalecen en muchas comunidades y que anulan completamente la participación de las mujeres en la toma de decisiones, por lo tanto es urgente que conozcan sus derechos y darles asesoría y acompañamiento en casos específicos.

Hernández Aragón recordó que si bien los pueblos indígenas tienen derechos colectivos y autonomía para determinar sus sistemas normativos internos y su forma de gobierno, éstos no pueden violentar los derechos humanos, por lo tanto las mujeres deberían participar en igualdad de condiciones en las funciones públicas.

Por fortuna ya hay mecanismos de defensa a los derechos políticos de las mujeres y específicamente de las mujeres indígenas, como el Protocolo para Atender la Violencia Política contra las mujeres por Razones de Genero y el Protocolo para Defensoras y Defensores de los Derechos Político-Electorales de los Pueblos y Comunidades Indígenas (Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, 2017).

Este Protocolo establece los principios de actuación ante los casos de violencia política de género; por ejemplo, establece que se deben analizar los hechos que originaron el asunto de la mujer indígena que solicita la asesoría o defensa, desde una perspectiva de género y enfoque intercultural.

Finalmente la titular del IHM exhortó a las instituciones políticas a cumplir el principio de paridad electoral y en congruencia destinen adecuadamente los recursos de capacitación en materia de género a las mujeres, evitando actos superfluos o acciones que sigan reproduciendo los roles y estereotipos de género.