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PACHUCA, Hgo., 20 de mayo de 2016.- Luego de que la feria de Mineral de la Reforma fuera suspendida este año bajo el argumento de que no había fondos suficientes para su realización, el espacio adquirido y que costó millones de pesos ha quedado destrozado y en completo abandono.
La administración que encabeza el alcalde Filiberto Hernández Monzalvo, en el año 2013 trasladó la festividad mineralense a un terreno ubicado sobre la carretera Pachuca – Ciudad Sahagún.
Con ‘bombos y platillos’, en el mes de julio se anunció este cambio que a decir del Ayuntamiento, se hizo con el único propósito de traer una feria de primer nivel y que con el paso de los años, se posicionaría como una de las mejores del estado de Hidalgo.
En ese entonces, el Congreso local autorizó al municipio una deuda pública por 35 millones de pesos para comprar el terreno de 10 hectáreas donde se realizaría la feria.
En agosto se abrió las puertas al público y ya desde su inauguración se vislumbraba el poco éxito que tendría, pues siendo el día más importante, no contó con el número de gente que se esperaba.
Para los habitantes de Mineral de la Reforma y municipios colindantes, el lugar quedaba muy alejado de sus hogares y para acudir no se contaba con el transporte suficiente, situación que se dejó ver durante la celebración con la poca afluencia de visitantes.
En la primera edición, se presumió el nuevo palenque que contaría con la presentación de grandes artistas, entre ellos Paulina Rubio, cantante que no se presentó, pues su concierto fue cancelado.
Para 2014, se aseguró que este año se superarían las expectativas de la festividad de 2013; sin embargo, y debido al poco número de gente que asistió a los palenques, en esta edición se decidió quitar este atractivo y en cambio se dijo que sólo se invertiría en los artistas que se presentan en el teatro del pueblo.
Pero el 2015 fue el año que evidenció la mala planeación y el mal uso que se le hicieron a los recursos. La lluvia hizo que se vinieran abajo locales ubicados en el área de stand, perjudicando a comerciantes que invirtieron en un espacio para vender sus productos.
Por si fuera poco, el lugar donde se llevaban a cabo las presentaciones de los artistas, se convirtió en un lodazal, por estar ubicado en un terreno de terracería, situación que derivó en la cancelación de varios teatros del pueblo.
Ya para 2016, las consecuencias de malgastar millones de pesos en una feria poco atractiva, lograron que se tomara la decisión de continuar con su realización. En febrero de este año, fue filtrada a Quadratín Hidalgo una lista de artistas que se presentarían en el teatro del pueblo; sin embargo, poco tiempo después esta información fue desmentida por diversas páginas de redes sociales.
Ante el completo hermetismo que manejaron los organizadores, este medio de comunicación llamó a las oficinas de la Secretaría de Desarrollo Económico municipal, para pedir información sobre los costos de los stands y la fecha en que se llevaría a cabo la feria.
Las telefonistas sólo se limitaron a decir que el evento iniciaría el 28 de abril y pese a que la llamada se hizo tres semanas antes de esa fecha, aún no se tenían los costos para la adquisición de locales comerciales.
Al acercarse el día de apertura, nadie daba detalles sobre su realización y fue hasta una semana antes, que se informó de manera muy sutil que la celebración se cancelaría por el bajo presupuesto que tenía el Ayuntamiento.
Hoy en día, el lugar se encuentra en completo abandono; una malla se colocó para resguardar la zona, misma que fue destrozada y en el terreno ya no se observa a alguien vigilando las instalaciones.
Las construcciones hechas para baños y oficinas, hoy se encuentran pintarrajeadas y llenas de basura.
El alcalde Filiberto Hernández Monzalvo ha evitado hablar sobre el fracaso de la feria que costó millones de pesos.