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TULA DE ALLENDE, Hgo., 15 de marzo de 2016.- Más de una decena de árboles, algunos con una vida de más de medio siglo, están pagando la mala planeación de la obra del puente vehicular y peatonal Benicia, ejecutada de manera conjunta entre los gobiernos estatal y municipal.
Lo anterior toda vez que este lunes inició la segunda etapa de la construcción, que supondrá la demolición de tres jardineras y que se tengan que cortar un importante número de árboles situados en las áreas verdes.
En recorrido físico por el lugar, se pudo dar cuenta que cerca de seis grandes árboles fueron talados en el primer día de trabajos, ante la inconformidad de residentes de la Unidad Habitacional Pemex (UHP), quienes resolvieron parar la obra ante lo que catalogaron como un ecocidio.
La tala de los árboles y demolición de jardineras, se da para que la circulación del puente Benicia proveniente del centro de la ciudad pueda desembocar a la avenida Oriente y luego a la Norte de la colonia Pemex.
El corte de las áreas verdes ocurre aunque el ex secretario de Planeación estatal, Alberto Meléndez Apodaca, descartó en entrevista previa que se fueran a tirar árboles, mencionando que sólo se rehabilitaría y ampliarían las calles que van de Poniente 13 a la avenida Oriente.