Niños jornaleros piden a la Sedesol ‘una pelota’

PACHUCA, Hgo., 20 de julio de 2015.- Estefanía tiene 5 años, su rostro presenta quemaduras a causa del sol; su altura y peso son similares a alguien menor, debido a su deficiente alimentación. Es hija de dos jornaleros agrícolas provenientes de Chilapa, Guerrero, que desde el pasado 19 de mayo llegaron al albergue de La Mora ubicado en el municipio de Francisco I. Madero, en el estado Hidalgo, para la cosecha de ejotes.

“Uuuuy bien poquito, como 100 pesos” responde la tía de Estefanía cuando se le pregunta ¿cuánto gana por día?

Los familiares de la niña y más de 90 personas esperan sentados a que inicie el evento de Sedesol, en donde se firmará el convenio con la Asociación Civil Unión Hidalguense A.C. y se llevará a cabo la Feria de Apoyos y Servicios Interinstitucionales del Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas.

La mitad de quienes esperan son infantes y adolescentes de entre dos y 17 años, la mayoría presentan problemas de desnutrición y enfermedades gastrointestinales, aseguró Onésimo Serrano González delegado de la Secretaria de Desarrollo Social en Hidalgo (Sedesol).

Hasta el mes de octubre los albergues ubicados en Hidalgo que dependen de esta delegación, atenderán a mil 037 jornaleros agrícolas provenientes de Morelos y de Guerrero, que trabajan en la cosecha de ejotes, en jornadas extenuantes a pesar que la delegación de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social a cargo de Daniel Lara Baños vigila se respeten su derechos laborales.

El propio Lara Baños dijo que la dependencia a su cargo está al pendiente de que se les respete sus derechos humanos, por lo que constantemente se hacen supervisiones en los campos agrícolas para mejorar las condiciones de trabajo.

“Hasta el momento se han hecho 25 visitas, no hemos encontrado niños que trabajen” agregó Lara en entrevista.

“La multa a los patrones por ocupar a niños y niñas en estos trabajos va de 250 a 5 mil salarios mínimos”, puntualizó.

Ramón el hermano de Estefanía tiene 13 años y dice que no va a la escuela, porque trabaja igual que sus padres en los campos del Valle del Mezquital, región que visitan cada año entre los meses de mayo y octubre.

Otros hijos de los jornaleros de 11 y 10 años comentan que en la mañana trabajan y en la noche juegan en el albergue por lo que quieren que los de Sedesol les den una pelota.

Serrano González detalló que este año los albergues a cargo de la Sedesol superaron las expectativas de alojo a los jornaleros agrícolas, hay un déficit de 340 mil pesos en alimentos para los niños y niñas, dijo en entrevista.

“Lo solicitaremos en oficinas centrales”, prometió.

De acuerdo a estudios de María Antonieta Barrón investigadora de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en Hidalgo sólo 400 de los jornaleros agrícolas cuentan con prestaciones sociales de 80 mil trabajadores de este sector que principalmente labora en la zona del Valle del Mezquital.