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TIZAYUCA, Hgo., 25 de marzo de 2024.- Dos días hábiles dio como plazo la presidenta municipal de Tizayuca Susana Ángeles Quezada a habitantes de la localidad indígena de Huitzila para que le otorguen el control de su pozo de agua potable.
En entrevista para Quadratín Hidalgo, afectados explicaron que esta comunidad indígena cuenta con su propio sistema de agua potable desde el año 1938; sin embargo, ahora es el municipio que busca tener el manejo en la operación de este.
«Somos un pueblo originario que desde hace años buscó manejar sus propios recursos sin la intervención del gobierno estatal o municipal y así ha sido. Pero ahora por el mal manejo de unos cuantos, la presidenta se quiere aprovechar de la situación y quitarnos algo que es nuestro » detallaron.
Según lo mencionado, en el año 2017 se creó la Junta General de Agua y Alcantarillado de Huitzila, encargada del manejo de el pozo, pero el encargado de la misma desvió recursos y adeudó pagos a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Fue entonces cuando los pobladores desaparecieron la Junta General de Agua y crearon el Comité de Administración de Agua de Huitzila, siendo esta la que negoció con la CFE para efectuar los pagos atrasados.
Acordando entonces que el adeudo ya no tendría efecto, sin embargo la CFE explicó que la nueva bajada de luz para el pozo no podría quedar a nombre del Comité, esto basado en la ley de Aguas Nacionales, por lo que solicitaron que el contrato se hiciera con el municipio.
«Dialogamos con la autoridad municipal y le explicamos la situación entonces quedamos en que ellos solo prestarian el nombre para hacer la bajada, pero el pozo seguía siendo de nuestra propiedad y responsabilidad» señalaron.
Después de años de haber funcionado de esta manera, ahora acusan a Susana Ángeles Quezada de aprovecharse de esta situación para querer apropiarse del pozo de agua.
Agregaron que la intención del gobierno municipal es realizar cobros excesivos a las casi 11 mil personas que habitan en Huitzila.
La tarde de ayer domingo, sostuvieron una asamblea con las autoridades municipales encabezadas por Ángeles Quezada y Rodolfo Rodríguez director de la comisión de Agua y Alcantarillado de el municipio (CAAMTH), reunión en la que los pobladores se negaron a entregar el control del pozo.
Por su parte la presidenta municipal otorgó un plazo de dos días para lograr un acuerdo entre ambas partes, de no ser así anticipo solicitaría a la CFE la cancelación de el contrato de luz.