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TULA DE ALLENDE, Hgo. 4 de noviembre de 2024.- A través de un comunicado, integrantes de la Asociación Regional de Profesionales de la Comunicación (Areproc) condenaron que por presuntas órdenes del alcalde de Tula de Allende, Cristhian Evanivaldo Martínez Reséndiz, la oficial mayor del ayuntamiento, Karina Gutiérrez Lozano y la titular de comunicación social, Andrea Rodríguez, se haya revivido el denominado corral de la ignominia.
Según el comunicado, los hechos son un claro intento de limitar y restringir las libertades de expresión y de prensa.
Lo anterior sobreviene luego de que la mañana del lunes 4 de noviembre, al acudir a dar cobertura de una sesión de Cabildo, trabajadores de los medios se encontraron con la “instrucción” de que si querían permanecer en el encuentro de Asamblea debían hacerlo de pie y limitarse a una reducida área, que estaba limitado con una cinta amarilla, además de pasar lista.
Otra condicionante que se les dio a los comunicadores es que debían llegar a las sesiones antes de que estas iniciaran (8 de la mañana), porque si no lo hacían, ya no les permitirían el acceso, ya que al llegar extemporáneamente “interrumpían” el desarrollo de los trabajos de los miembros del ayuntamiento.
Esta particular recomendación, incluso se giró a los comunicadores en el grupo de WhatsApp del municipio, donde se externó: “se hace de su conocimiento que para mañana, los medios que quieran entrar a cubrir la sesión, tendrán que llegar antes de que esta comience y registrar su asistencia, de lo contrario ya no se les dejará entrar”.
La publicación interroga de quién fue la iniciativa de revivir el corral de la ignominia, si del presidente Evanivaldo Martínez, la comunicadora, Andrea Rodríguez o la oficial mayor, Karina Gutiérrez, o si se determinó en consenso, pero exhortaron al Ejecutivo municipal a conducirse con respeto hacia la prensa y mantener un diálogo abierto con el gremio.
El comunicado finaliza con el comentario de que resulta incongruente que un gobierno emanado de izquierda tenga un comportamiento tan autoritario y retrógrado, por lo que invitan al alcalde a recular en sus decisiones.
FUNCOPE repudia prácticas retrógradas de gobierno de Tula de Allende
Paralelo al comunicado de la Areproc, La Fundación para la Comunicación y el Periodismo A.C. (FUNCOPE), condenó “las acciones ofensivas y retrógradas” del alcalde de Tula de Allende, Christian Martínez Reséndiz y su equipo “de trabajo”.
Mediante su propio escrito, -en que externa su respaldo a los comunicadores de Tula de Allende- afirma que la decisión de delimitar y pretender encajonar a los periodistas, es ofensiva y entorpece su actividad profesional.
Le recuerdan al Ejecutivo municipal que la sala del ayuntamiento en la que se llevan a cabo las sesiones de Cabildo, es un espacio público, donde se realizan actividades públicas y se genera material de interés para la sociedad y argumenta que los periodistas no van a su domicilio particular como para que se coarte su ejercicio de trabajo ni ponga reglas con carácter restrictivo.
Los miembros de la FUNCOPE finalizan la misiva, dirigida a la opinión pública, que revivir “el corral de la ignominia” emana un tufo de talante autoritario y refleja una arcaica forma de gobernar que no concuerda con la actualidad ni mucho menos con la transformación que impulsa el gobierno de Hidalgo.
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