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Cortan luz a la sede del PRI en Hidalgo por falta de pago
TULA DE ALLENDE, Hgo., 22 de septiembre de 2021.- Todo un drama se vivió esta mañana en el predio conocido como La Nopalera, en la Segunda Sección de El Llano, en este municipio, donde más de cien familias fueron desalojadas por la fuerza y sus casas derrumbadas en presencia de policías municipales y estatales, así como de un visitador de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo, convocados por un actuario y representantes de los dueños legítimos de los terrenos.
El añejo conflicto pareciera terminar este día al entrar, presuntamente sin previo aviso, policías con equipo antimotín y maquinaria pesada a desalojar las casas construidas por quienes son acusados de invasores.
Ya meses atrás se había intentado el desalojo, pero, ante el aviso, los presuntos paracaidistas se armaron con piedras, palos y machetes para defender sus casas, construidas a lo largo de al menos cinco años.
Campesinos del Ejido de San Pedro Alpuyeca señalan que la invasión tuvo lugar en siete hectáreas, las cuales hoy reclamaron por la fuerza personas que, en su mayoría, son originarias de Oaxaca.
Los acuerdos no fueron posibles hoy, ya que los representantes legales de los propietarios exigían al menos 500 mil pesos por predios de hasta 400 metros, sin oportunidad de negociar sino en el momento.
Ante la falta de solvencia para cumplir con el pago exigido, familias enteras, incluso con menores de edad, protagonizaron dramas en cada casa amenazando con no salir sin importar lo que pasara, ante la acción inminente de la maquinaria pesada utilizada para el derribo de las viviendas.
Igualmente, en momentos, los pobladores se ubicaban frente a las máquinas esperando evitar su paso mientras mujeres lloraban en el interior de las casas suplicando que no fueran derribadas, mientras otros tantos trataban de salvar lo más posible de sus pertenencias.
El actuario y representantes de los presuntos dueños no dieron declaraciones sobre el hecho, informando únicamente que cuentan con una orden de desalojo que no había sido ejecutada y que se efectuaría el día de hoy.
Los vecinos afectados, en tanto, aseguran que no hay documentos que respalden el desalojo del que fueron víctimas, pero tampoco pudieron comprobar de manera fehaciente la pertenencia de sus predios.
Al momento, el lugar continúa resguardado por policías hasta culminar la ejecutoria.