Descontento social en Tulancingo; crecen protestas contra el alcalde

PACHUCA, Hgo., 13 de agosto de 2017.- El descontento y desaprobación al proyecto para modificar el sendero intermunicipal de Tulancingo que impulsa el alcalde Fernando Pérez Rodríguez, tuvo eco esta mañana cuando más de 800 personas entre ciclistas, corredores y ciudadanos protestaron y exigieron frenar este plan al considerarlo «innecesario e improductivo para la sociedad».

Durante la actividad que inició a las 9 de la mañana, que se calificó de exitosa por la gran convocatoria de tulancinguenses y deportistas entre ellas la medallista en ciclismo de montaña Daniela Campuzano, se llamó a defender esta área verde.

La convivencia deportiva en favor de mantener el sendero como se encuentra actualmente fue de ambiente familiar y totalmente ciudadana, sin la intervención de partidos políticos, destacó uno de los integrantes del movimiento para Salvaguarda del Sendero Interminucipal de Tulancingo, Ricardo Bravo.

Durante el encuentro, los activistas insistieron en la necesidad de transparentar este proyecto, el cual ha sido impulsado en medio de contradicciones y falsedades tanto del alcalde Fernando Pérez como de sus propios funcionarios, quienes hace unos días lo dejaron en evidencia al reconocer su incapacidad para explicar dicho plan de remodelación, además de que no había siquiera un esquema para llevar a cabo dicho trabajo, como presumía el edil priista.

Los activistas no quitaron el dedo del renglón al afirmar que detrás de este proyecto impulsado por el alcalde de Tulancingo sólo se busca beneficiar a un grupo de particulares, ya que no resuelve ninguna problemática.

A esto se añade el cambio de proyecto en pocos días, lo cual le resta seriedad al mismo aseveró Ricardo Bravo, quien agregó que el martes pasado se les mostró uno y ayer les mostraron otro completamente diferente, lo cual deja en evidencia que es un «proyecto al vapor».

“Desde su inicio el proyecto no ha sido participativo, metropolitano ni incluyente, no contribuye con el orden público, no tiene una visión a futuro el proyecto, no se alinea a las políticas públicas del gobierno federal, estatal y municipal”, destacó el activista.

Ahora lo que se busca es que el mismo ayuntamiento haga un decreto donde se le catalogue al sendero como una reserva natural donde se respete todo el entorno que lo rodea, como se hizo hace algunos años.

Sin embargo, si el ayuntamiento continúa empecinado el hacer el proyecto, se tomarían otras medidas de tipo legal, sin embargo éstas todavía no se aterrizan, manifestó el integrante del movimiento de salvaguarda.

Movilización fallida

Pero mientras la ciudadanía mostró el rechazó a este proyecto con una masiva presencia en el sendero intermunicipal, una movilización tuvo lugar este mismo día en Tulancingo convocada por el presidente municipal, Fernando Pérez y cuya finalidad fue desacreditar al movimiento de salvaguarda de este espacio natural.

Durante esta mañana alrededor de 60 personas, la mayoría empleados del ayuntamiento, se pronunciaron a favor de los cambios al sendero y a través de volantes explicaron los beneficios que traería este cambio.

Sin embargo, dicha movilización no tuvo eco ni gran impacto entre los ciudadanos.

Por separado, activistas denunciaron que por órdenes del alcalde, personal del ayuntamiento de Tulancingo inició una guerra sucia y campaña de desprestigio en contra de los activistas que encabezan el movimiento de defensa del sendero intermunicipal.

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Lo que reclaman los Tulancinguenses sobre el proyecto para remodelar el Sendero Intermunicipal:

1. No hay transparencia, la presidencia municipal de Tulancingo gestionó recursos para el proyecto denominado Ampliación del Bulevar Bicentenario a través del ramo 23, recursos asignados para la construcción de pavimentaciones, calles, alumbrado y alcantarillado.
2. No hay un objetivo del proyecto y no resuelve una problemática, por lo que no es necesario su modificación. Por el contrario, las 3 diferentes propuestas que han presentado afectan y alteran el medio ambiente, el equilibrio ecológico, el ecosistema, el paisaje, la integración social y la identidad del municipio.
3. Desde su inicio, el proyecto no ha sido participativo, metropolitano ni incluyente. No contribuye al orden urbano.
4. No tiene visión de futuro, No se alinea a las políticas públicas del Gobierno Federal, Estatal y Municipal, así como de ONU Habitat, Sedatu, Infonavit, Índice de Prosperidad Urbana.

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