Apuesta PAN por incrementar militancia en Hidalgo
PACHUCA Hgo., 6 de septiembre de 2018.- De nueva cuenta el presidente de la mesa directiva del Congreso Humberto Veras Godoy rompió la sesión e impuso un nuevo receso, en protesta porque los diputados morenistas no reconocen a María Luisa Pérez Perusquía como presidenta de la junta legislativa, designación que se hizo el pasado lunes.
Durante la sesión donde se presumía por fin reaundarían los trabajos en el Congreso local luego de un receso de más de 48 horas fue sólo un escenario donde la mayoría morenista y las minorías representadas por las demás fuerzas políticas esgrimieron sus argumentos para detallar quien se encontraba con la razón de presidir el primer año de trabajo legislativo, situación que fue subiendo de tono sobre todo en acusaciones entre los propios diputados.
Los ánimos también se sintieron en las gradas para el público en donde lanzaron consignas y gritos tanto simpatizantes del PRI y el PAN contra los legisladores de Morena, quienes exigían se diera cumplimiento al órden pendiente desde el pasado martes, cuestión que ocasionó que el presidente de la directiva, Humberto Augusto Veras Godoy estableciera un receso basado en el artículo 118 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo.
Esto ocasionó que el ex rector abandonara el recinto junto a los demás diputados se Morena, lo que causó la reprenda de la oposición y sus acompañantes en las gradas.
Previo a la nueva pausa, los legisladores expusieron sus criterios en cuanto cuál de los grupos entre mayorías y minorías tenía el derecho de poseer el primer año de la presidencia en la Junta de Gobierno, donde el PRI pidió continuar con la sesión del 4 de septiembre donde se votó a María Luisa Pérez Perusquía como titular del Poder Legislativo, decisión tomada por 5 de los 7 coordinadores de los partidos políticos, lo que se constituía como legal.
En cambio, el grupo legislativo de Morena arremetió contra estas versiones al señalar que la propia ley en su artículo 99 de la ley orgánica donde hace referencia a la preferencia que tendría su partido para presidir el Congreso en primer año bajo la figura del voto ponderado, que los ubica con más de 65 por ciento de la representación de diputados.
Acto seguido, los priístas desestimaron la versión morenista al argumentar que no se podía poner a interpretación la ley, esto a pesar de que se ubica en dicha ley, por lo cual se empecinaron en que el PRI tenía la mayoría en las votaciones gracias a los coordinadores y representantes de partido 5 a 2 votos.
Esto los diputados de Morena lo reprocharon al exponer que se violentaba la ley para que el PRI continuara como partido hegemónico a pesar de no tener mayoría, cuestión que también vulneraba la voluntad popular que se reflejó en las urnas en julio pasado, lo que consideraron antidemocrático.
En las repetidas intervenciones entre ambos bandos, salieron a relucir dimes y diretes entre los representantes populares, tales como el desconocimiento de la ley, la falta de argumentos para solicitar el receso, la necedad de abocarse a lo que por ley se expone, hasta señalamientos por presuntas irregularidades encontradas en la pasada administración del Congreso estatal, la cual presidía Pérez Perusquía, así como aferrarse a no dejar el poder toda vez que la ciudadanía no los refrendo como idóneos para que los representara en el poder legislativo, dichos que a su vez eran tanto abucheadas como vitoreadas por los seguidores presentes a espaladas de las curules.
Ante la polémica que este asunto continúa causando, se plantea reinstalar la sesión el próximo martes 11 de septiembre en punto de las 18:00 horas, en donde no se sabe si se pondrá fin a esta crisis parlamentaria o se agudizará hasta el punto de ahora sí interponer ante el Senado el recurso para la aplicación de la desaparición de poderes en la entidad.