Listos consejos distritales en Hidalgo para elección del PJF
PACHUCA, Hgo., 7 de octubre de 2018.- En los últimos años se asesinaron a 36 militantes de Morena en el país, y sólo en el pasado proceso electoral de julio perdieron la vida a causa de la violencia 152 precandidatos, candidatos y militantes de las diversas fuerzas políticas, destacó el secretario nacional de Derechos Humanos de Morena, Carlos Figueroa Ibarra.
Durante el encuentro “Derechos Humanos para perseguidos políticos”, el catedrático e investigador en su intervención abordó el estado de violencia y vejaciones a los Derechos Humanos en el país, práctica que tiene un antes y un después a partir de la entrada del neoliberalismo en México.
En un compendio que realizó de los militantes de Morena víctimas de la violencia generada en los últimos años, resaltó que son 36 las personas asesinadas, y para resaltar la gravedad de la situación subrayó que un tercio de ellos fueron ultimados en este 2018.
Resaltó que el principal factor no fue en si pertenecer a las filas de este partido político, sino que la causa de sus muertes se atañe a su quehacer como activistas en defensa y lucha contra proyectos y desarrollos de multinacionales que vulneran los derechos de comunidades y sus espacios.
“Otra parte importante de ellos, los asesinaron no por formar parte de Morena, sino porque eran parte de Morena pero al mismo tiempo estaban luchando, por ejemplo, contra las plantas geotérmicas en Nayarit, o estaban luchando por los derechos indígenas en Oaxaca”, expuso el investigador guatemalteco naturalizado mexicano.
De igual forma mencionó que producto de la violencia generada por el proceso electoral reciente, arrojó como saldo negro un total de 152 candidatos, precandidatos, militantes y hasta presidentes municipales electos.
En cuanto al tema de las violaciones a los derechos humanos, Figueroa Ibarra resaltó que hoy en día el agente represor cambia de estafeta así como los presos políticos sus características; es decir, anteriormente bajo los gobierno priístas, los actos represivos se establecían contra los militantes principalmente por su orientación ideológica, esencialmente de tipo socialista, además de que estos tenían como singularidad ser militantes de partidos u organizaciones políticas contrarias al régimen, que era lo que le atraía las vicisitudes.
Mientras que a raíz de la entrada del proyecto neoliberal a México, el hostigador ya no es sólo el gobierno, sino que este ha dado la estafeta a varios personajes, como las empresas multinacionales, otro tipo de grupos con intereses económicos y el crimen organizado.
Además de que los presos políticos de estos tiempos ya no son necesariamente militantes de partidos de oposición al régimen, ni marxistas o socialistas, sino que son ciudadanos que lidian con problemas de las comunidades y por el desarrollo de éstas, mismos que muchas veces llegan a las cárceles, o a la muerte por su activismo.