Gastará gobierno de Hidalgo 3 mdp en tamaliza decembrina
PACHUCA, Hgo., 3 de octubre de 2018.- Desde 2016 cuando se recrudeció la violencia en municipios hidalguenses contra presuntos delincuentes y hasta la fecha se han registrado cinco linchamientos dejando un saldo de seis muertos, sin que hasta el momento la Procuraduría General de Justicia estatal rinda informes sobre los hechos, por lo que de las investigaciones y detenidos poco o nada se sabe.
El 2 de julio de 2016 se registró un linchamiento en el municipio de Tlaxcoapan, donde pobladores retuvieron y golpearon a dos personas acusadas de raptar a una niña; el varón murió tras la fuerte golpiza que recibió, mientras que una mujer fue tundida y amarrada a un poste, aunque después la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) rechazó que se tratara de secuestradores, como habían especulado sus agresores.
Y 10 meses después el 11 de mayo de 2017, tres personas fueron retenidas y golpeadas en el municipio de Huasca de Ocampo, señaladas de robar en una vivienda de la región. A causa de las lesiones, uno de los agredidos murió tres meses después en el hospital.
Sin embargo, este año se han reportado ya tres linchamientos y el primero ocurrió el 23 de agosto en la comunidad de Texcatepec, en el municipio de Chilcuautla, donde una multitud golpeó y quemó a una persona presuntamente responsable de robar una camioneta y horas después falleció en el Hospital Regional del Valle del Mezquital.
El 30 de agosto se registró un hecho similar en la comunidad de Santa Ana Ahuehuepán en el municipio de Tula de Allende, donde una pareja fue linchada presuntamente por dedicarse a “robachicos”. Sin embargo, a más de un mes de aquel hecho las autoridades no han hallado indicios sobre esta situación.
Las autoridades han quedado rebasadas ante estos hechos y esto quedó confirmado el pasado 27 de septiembre, cuando un servidor público de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo fue linchado en el municipio de Metepec presuntamente por fotografiar a menores de edad. La imágenes y videos que circularon por redes sociales dieron cuenta del bestial acto cuando al servidor público le rociaron gasolina y le prendieron fuego para quemarlo vivo.
Junto al agente del Ministerio Público otras tres personas fueron retenidas y golpeadas aquel día.
La Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) abrió las respectivas carpetas de investigación contra quienes resulten responsables, sin embargo, hasta el momento no ha detenido a ninguna persona implicada en estas agresiones.
Ante esta aparente falta de información por parte de la PGJEH, el diputado local José Luis Muñoz Soto dijo que el gobierno del estado debe aclarar esta situación y en caso de ser necesario el procurador Raúl Arroyo González debe ser llamado al Congreso local para que rinda cuentas sobre las acciones emprendidas en torno a los linchamientos.
En tanto, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) también abrió las investigaciones por oficio sobre los linchados en Tula, Metepec y Chilcuautla, aunado a los hechos ocurridos el año pasado en Huasca, donde también pobladores golpearon a tres personas y una de ellas murió meses después.