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Las primeras vacunas contra el Covid-19, no llegaron a las zonas donde más contagios y muertes ha provocado el coronavirus, sino que por decisión presidencial se enviaron a las zonas rurales y para el caso de Hidalgo, los primeros beneficiarios son los habitantes de los municipios de la huasteca hidalguense.
Por otro lado, la solidaridad ciudadana siempre sorprenden gratamente y un grupo de vecinos de Pachuca, se han echado a cuestas apoyar a aquellas personas que enfrentan serios problemas económicos que, incluso, les impiden tener alimentos para poder subsistir.
Las críticas no se hicieron esperar y en diversos espacios se cuestiona la decisión de llevar las primeras vacunas a ciudadanos, a las zonas rurales y no a las de mayor incidencia que se encuentran en el medio urbano.
Es deseable que en todos los casos, las personas que reciban la primera de dos dosis, no presente reacciones que pongan en riesgo su salud y hasta su vida, de lo contrario será más complicado trasladar a una persona desde una comunidad alejada de la cabecera municipal de cualquier municipio huasteco, que hacerlo en una zona urbana.
El infectólogo y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SIN), Alejandro Macías, consideró en una entrevista radiofónica con el periodista José Cárdenas, que la aplicación de las vacunas debió comenzar en zonas de alta incidencia y no en comunidades alejadas y con pocos contagios.
Agregó que el proceso de vacunación es muy lento y lo ideal sería que se aplicaran seis millones por mes, a un ritmo de 200 mil diarias.
Además, de que la aplicación de la primera dosis no necesariamente significará que el número de contagios baje, pues tendrán que esperar varias semanas para determinar que no hubo personas con reacciones y entonces comenzar a ver si se van reduciendo los contagios de manera paulatina.
En este contexto llama la atención y es altamente valiosa la decisión de un grupo de personas e Pachuca, que decidieron aportar su granito de arena para ayudar a aquellas personas que por la pandemia han perdido su capacidad económica, hasta para llevar lo elemental para la subsistencia de sus familias.
Ellos abrieron un comedor comunitario, ubicado en Cultura de Jesús (plaza Tulipanes), en el bulevar Nuevo Hidalgo. Los días martes y jueves a las 14:30 horas, se le dará comida sin costo a quienes tengan necesidad de recibir esa importante ayuda.